Vida en triste soledad,
Amor de doloroso lamento,
Pérdida del amor y de esa libertad,
Que me hacia un ser completo.
Como un puñal que atraviesa mi alma,
Una mañana fría de un mes de enero,
Privaste a mi pobre corazón de su calma,
De su mayor tesoro y le arrancaste el llanto primero.
Ya no tendré esos tiernos besos,
Esas escalofriantes caricias,
Que recorrían mi cuerpo tenso,
Ya no tendré más dulces momentos de esos.
Te perdí y contigo a mi vida,
Ya que en ella solo existías tú,
Sin mentiras ni malicia,
Desterrada tengo mi felicidad en un baúl.
Si duele el haberte perdido,
Aún duele más el recuerdo,
De unos proyectos contigo,
Y sin poder susurrarte al oído,
Cuanto te quiero…